En Altavoz

Este martes ha comenzado un juicio histórico: 12 líderes secesionistas se sientan en el banquillo del Tribunal Supremo por promover y ejecutar un plan para lograr la independencia de Cataluña. Para Puigdemont, el gran ausente, se juzgan a 2,3 millones de catalanes que votaron en la consulta. El inicio del juicio va estrechamente ligado al debate de los Presupuestos, en el que los partidos independentistas mantienen su enmienda a la totalidad. ¡Escúchalo entero dándole al play!

Un día después de la concentración en Colón, fiasco para el Gobierno y éxito para los convocantes, la posible negativa de los partidos catalanes a las cuentas del Ejecutivo en la sesión parlamentaria del miércoles amenazan con la convocatoria de elecciones. Desde Moncloa se ha filtrado una posible fecha: el 14 de abril, aniversario de la II República y cumpleaños de Santiago Abascal. ¡Escúchalo entero dándole al play!

El Gobierno reduce una marcha en sus negociaciones con la Generalitat. Del vamos a ver si con un relator que nos tome nota de lo que hablamos con los secesionistas arreglamos nuestros presupuestos... y de paso los vuestros también... A marcar una línea roja infranqueable. Nada de referéndums de autodeterminación. Ya sabemos cómo acabó el último intento independentista de convocatoria.

La concentración contra el Ejecutivo de Pedro Sánchez, la que se gesta raíz de los guiños al independentismo, de esas reuniones con la Generalitat asistidas por un relator, ya tiene lema: Por una España Unida. ¡Elecciones Ya!. Domingo 10 de febrero. Plaza de Colón. Madrid. A las 12 del mediodía. Casado dice que se va a pasar por allí, no como por el máster. Y no es al único al que le cunde, al que le presta, al que le renta la movida. ¡Escúchalo entero dándole al play!

Pocas veces antes se había hablado tanto de un relator como lo ha hecho la vicepresidenta Carmen Calvo. Aunque tampoco es que maneje al dedillo el siginificado. Hoy, si Marina d'Or es ciudad de vacaciones; España ha sido relat'Or, ciudad de relatores. La figura intermediaria que el Gobierno plantea en las conversaciones que mantiene con la Generalitat incomoda a la oposición. ¿Y las elecciones pa 'cuándo? Pues no se sabe. Pero lo que ya hay es una manifestación promovida por PP, Ciudadanos y Vox para el próximo domingo en la madrileña plaza de Colón. La derecha advierte. No más cesiones del Gobierno al independentismo.

Pedro Puy, portavoz del PP en el Parlamento de Galicia, no ha tardado ni dos semanas en desdecir lo planteado hace apenas dos semanas en la cámara autonómica. De reclamar el PP, junto con el resto de grupos, el mismo techo competencial que Cataluña o el País Vasco, a decir que bueno, ya primero vemos cómo quedan los presupuestos y luego ya si eso vendrá lo de las competencias, que tampoco es para tanto. Donde dije digo, digo Diego. Toda la oposición, la misma que respaldó al PP en su demanda para alcanzar el máximo techo competencial para Galicia ha criticado el repliegue de velas. Porque mejorar los presupuestos para la comunidad tampoco tiene porqué estar reñido con la pelea por más competencias.

La táctica de los barones populares cambia. Lo que es imprescindible es estar en el poder. Y el cómo ya pasa a un segundo plano. Tanto Monago en Extremadura, como Francisco Núñez, que preside a los populares castellano manchegos, creen que se puede «convivir» con Vox, buscar puntos de encuentro y reeditar en otras comunidades el pacto que con la extrema derecha y Ciudadanos ha llevado al PP a presidir la Junta de Andalucía. Sin embargo, no hace mucho, no querían que su marca se desdibujase...

Galicia cuenta con un minifundismo genético único en el mundo. Hasta ahora no se había visto nada igual en todo el planeta, salvo en grupos aislados por fuertes barreras geográficas.

Da igual el mes, Pedro Sánchez sabe que los resultados del CIS le dejarán siempre como presidente en unas futuras elecciones. Y así está pasando desde que Tezanos llegó a la presidencia del centro. El histórico dirigente socialista fue incapaz de adelantar la debacle del PSOE en Andalucía o la irrupción de Vox; a lo que se suman los sucesivos cambios en la metodología que han impuesto a cada barómetro el cuño de «la cocina de Tezanos». El PSOE repite como la fuerza más votada y el PP se cae a la cuarta posición en el barómetro de enero.

La formación morada se desangra, al menos en cuanto a la salida de algunos de sus integrantes más destacados. Después de unas andaluzas con malos resultados y con unas municipales cuya cuenta atrás ya ha empezado. Se acaba el tiempo, en una caída en la que poco falta para tocar fondo. De ahí que se convoque al Consejo Ciudadano para reforzar la unidad y la cooperación y de paso mejorar la imagen de una marca que cotiza a la baja. Podemos ha pasado de ser el Xiaomi de la política al Hacendado. En Podemos últimamente todos levantan su bandera, pero también hay que ponerse detrás de las pancartas ciudadanas, de los problemas sociales, ponerse el mono de trabajo, si se quiere, el mono obrero y volver a conquistar al electorado.

José Araújo, portavoz del PP en el concello de Ourense y mano derecha del alcalde, Xesús Vázquez, se va a menos de cuatro meses de las municipales. Deja un par de recados. Al regidor le dice que no se gobierna a base de selfis. Al portavoz de la oposición, Gonzalo Pérez Jácome, que tampoco es posible a base de insultos. Bueno Araújo, de ilusiones también se vive hombre. Pero yo aún no conozco a ningún presidente sin selfies. Ni a una oposición que no insulte. Así que tu dimisión, un tanto utópica, tiene por ello el doble de mérito.

Son palabras de 'Tito' Álvarez, portavoz de Élite Taxi. Representa a compañeros taxistas de su organización en Barcelona, aunque teniendo en cuenta lo retrógado, rancio, desagradable, repulsivo, carca, discriminatorio y primitivo de su discurso, sería mejor que solo se representase a sí mismo. Estimado Tito. Sorprende que te importe tanto la condición sexual de un ministro en plena lucha por mejorar vuestras condiciones frente a los denominados VTC. La legítima defensa de vuestros derechos no debería estar reñida con el respeto al resto de ciudadanos.

Escucha la voz de Ramón Espinar demostrando el amor por su pueblo tras imponerse hace más de dos años en las primarias de Podemos en Madrid. Un amor que por entonces no solo profesaba a su pueblo, también quería mucho a Pablo Iglesias. Era de hecho del ala pablista de Podemos. Iglesias quería que fuera él y no el sector errejonista el que ganase. Y él lo hizo, ganó. Pero ahora Pablo Iglesias no tiene ni a uno ni a otro.

Xosé Manuel Beiras, fundador de Anova, escisión del Bloque, pide un frente común de fuerzas nacionalistas de izquierda para concurrir a las próximas elecciones europeas. O sea que Beiras quiere que Anova, entre otros, se una al Bloque. Que sí, que sí. Beiras se posiciona con Arnaldo Otegi, que propone una gran alianza de partidos soberanistas gallegos, catalanes y vascos de cara a esos comicios europeos. Ya tiene la respuesta de Ana Pontón, portavoz nacional del BNG, y va a ser que no.

Acuerdo unánime de la cámara gallega para que Galicia aumente competencias en plena negociación de los presupuestos. Los diputados del PP sufrieron los reproches de toda la oposición. BNG y En Marea dicen que en una década apenas se quiso avanzar en autogobierno. Pero hoy, menos de 24 horas después de que el Gobierno de Pedro Sánchez se mostrase dispuesto a negociar con el PNV la transferencia de hasta 33 competencias al País Vasco, la cosa cambiaba.

Así respondía el futbolista Cristiano Ronaldo a la prensa tras evitar por un solo mes su entrada en la cárcel. Defraudó a la Hacienda Española cuatro años seguidos, de 2010 a 2014 y evitó así el pago al fisco de 6 millones. Por un solo mes (ha sido condenado a 23) esquiva la cárcel y pagará una multa de 19 millones.

Íñigo Errejón se va. Se va sin irse. Deja su escaño en el Congreso. Pero no Podemos. No su militancia en la formación morada, porque dice Errejón que eso, lo de Podemos, lo lleva tatutado en su piel como cofundador. Se va con Carmena a Más Madrid, encabezará la lista a la Comunidad plantando cara a Podemos, pero a la vez le gustaría que las fuerzas de izquierda se unieran al proyecto que él ahora encabeza. Se va sin quererlo vaya. ¿Entonces es lo mismo?, ¿es distinto?. ¿Realmente es otra forma de entender la política?