Nómada Digital

Hoy he publicado un episodio del podcast Nómada Digital que grabé estando casi cabreado. Y digo casi, porque probablemente el adjetivo correcto sería el de indignado. Mi indignación nace de la frustración, de ver que estamos en un mundo del que no comparto sus valores y del que no comparto cómo se valoran las cosas y las personas. Hace unos días veía a una persona jactándose de vender cosas absurdas a precios ridículos, justificándolo por el precio: “Lo pongo muy caro porque así la gente lo valora más y el que lo valora va a entender por qué vale mucho.” El mismo mensaje que LLados y tantos otros gurús digitales utilizan constantemente. Hay cosas y servicios digitales que cuestan un dinero, porque requieren de una atención personalizada, un seguimiento, duran mucho, lo que sea. Pero hay otras que sencillamente están infladas de precio, por que sí. Y los que las venden llaman mediocres a los que les critican y gili*****s a los que no lo compran. Diciéndoles que “si lo compraran, lo entenderían”. Es exac