Navegantes De 3 Cabezas

EDITORIAL Desde que Copérnico acabó con el universo geocéntrico no es lícito hablar de un centro del universo en particular, puesto que desconocemos sus límites y no tienen sentido los conceptos de arriba, abajo, norte, sur y similares. O al revés, dado que no somos capaces de ver sus esquinas, todos podemos considerarnos el centro del universo. Lo mismo ocurre con la atención primaria. Nos gusta considerarnos el centro y la base de la atención sanitaria en nuestro país. Nos lo repetimos febriles, nos lo juran y repiten nuestros políticos y gestores. Nos lo aseguran con palmadas en el hombro los especialistas hospitalarios. Pero igual que el empecinamiento religioso en considerar la Tierra como centro del universo no podía vencer a la realidad, y desde antes de Copérnico y desde el principio de los tiempos la Tierra ya no era ese centro, del mismo modo tanta repetición del mantra de la atención primaria como base y centro y blablablá no puede con la realidad. No somos el centro de nada. Somos una pieza más d